¿Buenas o malas vibras?¿plano astral?¿energías positivas o negativas?
El sentido primordial de este sitio web es el de brindar información veraz, objetiva, orientadora y con fundamento científico. Me corresponde ahora abordar un tema que puede ayudar a tener una mejor perspectiva de nuestra realidad.
He escuchado sobre algunos masajistas que realizan una serie de preámbulos, ritos, etc. antes y después de hacer el masaje a su paciente, con diferentes propósitos: "quitarle las malas vibras", "autoprotegerse", "hacer limpias", etc. etc. ¿Es real todo eso? Acompáñenme en este artículo.
Recordemos qué es el masaje: El masaje es tanto un arte (parte técnica viva y por ello en constante cambio y adaptación) como una ciencia (debés adquirir conocimientos de anatomía y fisiología). Sus beneficios han llegado hasta nuestros días evolucionando desde las técnicas más simples para proporcionar relajación y favorecer el sueño, hasta el desarrollo específico de algunas más complejas para aliviar o eliminar dolencias concretas del cuerpo o el organismo. Técnicamente, es un método de valoración (mediante la palpación) y de tratamiento manual, aplicado sobre la cubierta corporal y trasmitido por la presión mecánica de las manos a los diferentes órganos del cuerpo humano. Según la indicación y los objetivos de tratamiento propuestos, se pueden lograr efectos que generan acciones directas y/o reflejas sobre el organismo:
He escuchado sobre algunos masajistas que realizan una serie de preámbulos, ritos, etc. antes y después de hacer el masaje a su paciente, con diferentes propósitos: "quitarle las malas vibras", "autoprotegerse", "hacer limpias", etc. etc. ¿Es real todo eso? Acompáñenme en este artículo.
Recordemos qué es el masaje: El masaje es tanto un arte (parte técnica viva y por ello en constante cambio y adaptación) como una ciencia (debés adquirir conocimientos de anatomía y fisiología). Sus beneficios han llegado hasta nuestros días evolucionando desde las técnicas más simples para proporcionar relajación y favorecer el sueño, hasta el desarrollo específico de algunas más complejas para aliviar o eliminar dolencias concretas del cuerpo o el organismo. Técnicamente, es un método de valoración (mediante la palpación) y de tratamiento manual, aplicado sobre la cubierta corporal y trasmitido por la presión mecánica de las manos a los diferentes órganos del cuerpo humano. Según la indicación y los objetivos de tratamiento propuestos, se pueden lograr efectos que generan acciones directas y/o reflejas sobre el organismo:
— Mecánicos: En referencia a como las fuerzas mecánicas relacionadas con cada maniobra afectan a los tejidos.
— Fisiológicos-Higiénicos: Cuando se efectúa el masaje en una persona sana para proporcionar mayor vigor al organismo o para aliviar el cansancio, se asocia a la práctica de ejercicio gimnasias suaves y/ o baños termales.
— Preventivos: Estos se cumplen cuando se localiza por palpación una zona tensa o con posible lesión, cuando se delimita, y al comunicárselo al sujeto que recibe el masaje y al tratar. Así se cumplen dos de las funciones del terapeuta: Educar, y promover la salud aconsejando que el masaje este unido a la práctica de ejercicio moderado, para mejorar el bienestar general, y conseguir además que el tratamiento perdure.
— Terapéuticos: Cuando se utiliza el masaje para mejorar la función circulatoria, recuperar la movilidad restringida entre los tejidos dañados, aliviar o reducir el dolor, o para optimizar la conciencia sensorial. Por otro lado, en el momento en que el masaje proporciona relajación y bienestar, ayudando en la recuperación y el mantenimiento de la salud se convierte, aun sin pretenderlo, en un acto terapéutico. El masaje terapéutico debe ser realizado solamente por fisioterapeutas.
— Estéticos-Higiénicos: Cuando tiene por finalidad mejorar el aspecto externo de la persona, eliminando los depósitos de grasa, devolviendo al músculo su tono y relajando el cansancio. Igualmente tiene resultados higiénicos puesto que eliminar el cansancio en una persona sana produce un resultado estético.
— Deportivos: Cuando se efectúa para preparar a un deportista con finalidad competitiva antes, durante y después de la práctica del mismo.
— Psicológicos-anímicos, o para la relajación: El contacto de la mano experimentada proporciona seguridad y confort, a la vez que regula y alivia la tensión psico-física.
A partir de lo anterior podemos entonces ver claramente por qué lo que resalta es el beneficio FÍSICO y luego el sicológico (emociones, sentimientos, etc.). Nada que ver cuestiones ajenas a esto.
En mi caso personal, desde que inicié en el campo de la masoterapia JAMÁS he hecho rutinas iniciales de meditación antes de hacer el masaje a mis pacientes, JAMÁS he puesto velas de colores para x ó y cosa, JAMÁS he brincado de un lado a otro para alejar tal cosa, JAMÁS he sacudido mis brazos después de atender a mis pacientes para "despojarme de lo malo que se me haya pasado" del paciente, JAMÁS he usado verduras u hortalizas para "limpiar" la habitación, ni JAMÁS he utilizado substancias para ello. Y aquí estoy, normal, no ha pasado nada. ¿Por qué? Porque aquellas "acciones" son solamente supersticiones, creencias sin fundamento científico, que no he practicado, y por lo tanto NO PUEDE NI PODRÁ PASAR NADA. ¿Qué hay de mis pacientes? ¡Satisfechas con los resultados! Relajadas, tanto a nivel físico como sicológico. ¡Sin rituales ni acciones seudocientíficas!
— Fisiológicos-Higiénicos: Cuando se efectúa el masaje en una persona sana para proporcionar mayor vigor al organismo o para aliviar el cansancio, se asocia a la práctica de ejercicio gimnasias suaves y/ o baños termales.
— Preventivos: Estos se cumplen cuando se localiza por palpación una zona tensa o con posible lesión, cuando se delimita, y al comunicárselo al sujeto que recibe el masaje y al tratar. Así se cumplen dos de las funciones del terapeuta: Educar, y promover la salud aconsejando que el masaje este unido a la práctica de ejercicio moderado, para mejorar el bienestar general, y conseguir además que el tratamiento perdure.
— Terapéuticos: Cuando se utiliza el masaje para mejorar la función circulatoria, recuperar la movilidad restringida entre los tejidos dañados, aliviar o reducir el dolor, o para optimizar la conciencia sensorial. Por otro lado, en el momento en que el masaje proporciona relajación y bienestar, ayudando en la recuperación y el mantenimiento de la salud se convierte, aun sin pretenderlo, en un acto terapéutico. El masaje terapéutico debe ser realizado solamente por fisioterapeutas.
— Estéticos-Higiénicos: Cuando tiene por finalidad mejorar el aspecto externo de la persona, eliminando los depósitos de grasa, devolviendo al músculo su tono y relajando el cansancio. Igualmente tiene resultados higiénicos puesto que eliminar el cansancio en una persona sana produce un resultado estético.
— Deportivos: Cuando se efectúa para preparar a un deportista con finalidad competitiva antes, durante y después de la práctica del mismo.
— Psicológicos-anímicos, o para la relajación: El contacto de la mano experimentada proporciona seguridad y confort, a la vez que regula y alivia la tensión psico-física.
A partir de lo anterior podemos entonces ver claramente por qué lo que resalta es el beneficio FÍSICO y luego el sicológico (emociones, sentimientos, etc.). Nada que ver cuestiones ajenas a esto.
En mi caso personal, desde que inicié en el campo de la masoterapia JAMÁS he hecho rutinas iniciales de meditación antes de hacer el masaje a mis pacientes, JAMÁS he puesto velas de colores para x ó y cosa, JAMÁS he brincado de un lado a otro para alejar tal cosa, JAMÁS he sacudido mis brazos después de atender a mis pacientes para "despojarme de lo malo que se me haya pasado" del paciente, JAMÁS he usado verduras u hortalizas para "limpiar" la habitación, ni JAMÁS he utilizado substancias para ello. Y aquí estoy, normal, no ha pasado nada. ¿Por qué? Porque aquellas "acciones" son solamente supersticiones, creencias sin fundamento científico, que no he practicado, y por lo tanto NO PUEDE NI PODRÁ PASAR NADA. ¿Qué hay de mis pacientes? ¡Satisfechas con los resultados! Relajadas, tanto a nivel físico como sicológico. ¡Sin rituales ni acciones seudocientíficas!