Durante el transcurso de estos años, he escuchado a varias damas decir que temen recibir masajes de nuevo porque en experiencias anteriores las han maltratado, es decir, las han golpeado o presionado de tal forma que al día siguiente amanecen adoloridas, con moretones en brazos, muslos o espalda. Les han dicho que eso es normal pero nada más lejos de la verdad.
Un buen masaje, un masaje profesional, hecho por alguien calificado, realmente NO produce ni dolor ni moretones (Leer ACTUALIZACIÓN casi al finalizar)
Entonces, ¿por qué sucede eso?